Si señor/a, algo tan simple como la psicología del color puede ayudarte a convivir con tus emociones y poner límites, solo con el uso de herramientas cómo la manera en la que percibimos los colores y cómo influyen en nuestras emociones. Porque hoy, mientras nos lees quizás te sientas alegre, triste, miedos@ o enfadad@… acéptalo, no es nada malo sentir. Si te encuentras perdid@ en medio del camino, no pasa nada, no hay prisa, intentarlo es de valientes.
Hablemos abiertamente de ello y con completa sinceridad.
Puede ser que sientas miedo, no huyas, es completamente normal, te produce ansiedad, incertidumbre e inseguridad. Enfréntate a ello, busca un sitio tranquilo y bien iluminado en el que te sientas a gusto y cierra los ojos. Respira profundo lentamente el tiempo que necesites o llama a esa persona que te aporta serenidad y tranquilidad, solo escuchar su voz te relajará. A la hora de vestirte escoge el azul, color relajante que transmite seguridad y calma. También aceptamos el verde como comodín, un color que relaja, aporta estabilidad y tranquilidad.
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